LA MUSICA... En la Huasteca tamaulipeca, como en el resto de las Huastecas –Puebla, Veracruz, San Luis Potosí, Querétaro e Hidalgo-, existe una música singular y representativa: el huapango, una variedad del son. Es música para bailar, contar anécdotas, pedir aguinaldos en Navidad, burlarse con humor y lanzar pullas a los enemigos. Es música para bailar sobre una tarima de madera. Dentro del amplio contenido en huapangos con que cuenta nuestra región Huasteca existen sones característicos para trovar en los que destaca la languidez del violín, y el acompasado ritmo de la jarana y guitarra quinta, que integrándose a la entonada voz del trovador, despierta la sensibilidad de quien lo escucha. Por su parte, los trovadores huastecos nos subliman con la belleza de sus trovos y el léxico característico de la región, haciendo gala, en la versificación de cada una de sus décimas, de una maravillosa e inigualable capacidad poética innata. En esta región ...